LA IMPORTANCIA BOTÁNICA DEL ENCLAVE SE VE REFORZADA CON LA INFORMACIÓN BIOLÓGICA Y FENALOGÍA DE  ESPECIES

El Jardín histórico de Hervás fue inaugurado en 1945, siendo alcalde D. Manuel Álvarez Pérez, delineante de formación, hecho este que junto con su admiración por el madrileño parque de El Retiro, influyó notablemente en el diseño y selección de las especies vegetales. El proyecto inicial se planteó como una acción sanitaria que drenara las tierras cenagosas insalubres que ocupaban hasta esa fecha el lugar del ferial de ganado. En todo caso, y gracias a aquella apuesta, han sido generaciones las que durante los últimos setenta años han recorrido su infancia, mocedad, juventud y ancianidad entre sus ordenados parterres, al arrullo de los chorros de las fuentes.  

Su diseño original, de pulcra y precisa simetría afrancesada, contó con variados ejemplares de especies arbóreas, arbustivas y plantas de floración, predominando las coníferas periféricas y las palmáceas interiores, en un juego de asemejación con el entorno alpino exterior, y diferenciación por contraste, con las palmeras centrales. Fueron alrededor de sesenta árboles y más de setenta variedades de plantas de floración, entre ellos Abetos, Piceas, Cedros del Atlas, Cedros deodara, Cipréses de Lawsón, Palmeras canarias, Castaños de indias de flor rosada, Fresnos llorones, setos vivos, Laurus cerazus, Ligustrum de california, Adelfas, Rosales, Budleyas, Wergelias, Retamas, Dalias, Claveles, que con su belleza y ordenada armonía cromática han enriquecido nuestro patrimonio botánico y ocio recreativo. 

Con la intervención actual, cofinanciada por Diputación de Cáceres y el Ayuntamiento de Hervás, se realizarán tareas de poda y la mejora de arbolado y setos, así como renovación de bancos, papeleras y cajas nido.